Dicen que el 93% de la comunicación es no verbal. Y la habilidad de comunicar de manera efectiva, vaya que es importante en la vida. En cualquier campo o carrera, ser bueno comunicando nos hará sobresalir y tener mayor influencia.
Nos hace mejores líderes…
Sin embargo, a este más del 90% muchas veces no le prestamos toda la atención que deberíamos al comunicarnos.
Pero si lo que quieres es llegar a nuevas posiciones dentro de tu organización, conseguir más ventas, cerrar más y mejores contratos por tus servicios, seducir a esa bella mujer y/o ser más influyente en todas las demás áreas de tu vida, será necesario mejorar en este 90%.
Te mostraré 6 aspectos en los que debes de centrarte para mejorar tu lenguaje no verbal.
Te aclaro eso sí, que existen un montón de técnicas de lenguaje no verbal, sin embargo, acá trataremos solo 6 aspectos que me parecen relevantes.
La razón de esto, es que si quieres resultados relativamente rápido (desarrollar una habilidad requiere de trabajo y tiempo) es mejor centrarse en lo básico, en los fundamentos. En ese 10 o 20% que da la mayor parte de los resultados.
El enfoque de este artículo está en volvernos más creíbles e inspirar mayor confianza en uno mismo.
6 recomendaciones básicas para mejorar tu lenguaje corporal dramáticamente.
Presta atención a tu postura corporal.
Algo a tener en cuenta es la postura corporal. Si lo que quieres, es comunicar seguridad y confianza en ti mismo, deberías estar siempre con la espalda derecha, hombros hacia atrás (sin exagerar) y cabeza en alto.
Cuando estés sentado en una reunión o entrevista, siéntate con los pies apoyados en el suelo, no juegues mucho con estos, tampoco pongas uno sobre otro o cruces los tobillos.
Demás está decir que la espalda debes estar derecha y haz contacto visual con quienes forman parte de la reunión o entrevista.
Hacer contacto visual con las personas.
Otra cosa importante a la hora de crear confianza en el otro es hacer contacto visual.
No se trata de mirar fijamente a los ojos de la otra persona. Esto va generar cierta incomodidad, pero si cada cierto rato y sobre todo cuando se quiere hacer énfasis en aspectos relevantes.
Hacer contacto visual, es una muestra de seguridad en uno mismo.
Posición de los brazos y manos a la hora de negociar.
Primero ten en cuenta que tus manos deben de estar siempre a la vista de los demás. Esto es, no esconderlas.
La razón, es que si por ejemplo, metes tus manos en los bolsillos, se crea en los demás, cierta desconfianza ya que, podrías estar escondiendo algo.
Tampoco, deberías tocarte demasiado las manos y otras partes como la boca o la nariz.
Esto es señal de nerviosismo e incluso de estar mintiendo.
Cruzarse de brazos es una señal de no querer aceptar o no estar de acuerdo con lo que dice el otro.
Si notas esto en el otro, pues busca la forma de crear más confianza para que esté más receptivo a lo que le dices.
La voz.
Para sonar creíble, será necesario una intensidad enérgica (no es lo mismo que gritar).
También. tender a una voz de tono grave. Pero, se necesita ir variando de acuerdo a lo que se dice.
En cuanto a la rapidez a la que hablamos, será levemente más rápida de lo habitual para sonar más creíble (solo un poco más rápido, no te pases con esto).
Pero, no solo eso. Sino que además, vas a ir variando la velocidad. Lo menos importante, lo dirás un poco más rápido y lo de mayor relevancia lo dirás más lento y con mayor intensidad (más fuerte).
Proxemia.
Espacio en el que nos comunicamos.
Habrán diferentes situaciones y en cada uno es conveniente mantener diferentes distancias.
Así, en una situación formal, lo mejor es mantener cierta distancia, pero no tanta, como para causar desconfianza y no poder mantener la atención del o los otros.
Tocar al otro crea confianza, pero solo cuando se está en una comunicación informal. Ya sea que quieras seducir a una chica o estés con alguien a quien estimas. Tocar es efectivo a la hora de adquirir mayor influencia.
Las partes que se recomiendan tocar son los hombros, en algunos casos la parte alta de la espalda. La parte baja no se recomienda cuando se trata de alguien que no conoces, por lo menos, en un primer instante, ya que significa algo más íntimo.
Movimiento estratégico.
Cuando das un discurso ante tu audiencia posicionate en un lugar y ese será aquel donde das la introducción, pones el contexto, te presentas… Lo llamaremos punto A.
Luego establece dos lugares distintos. Uno para presentar los problemas, será el punto B y otro para presentar las buenas noticias y soluciones, el punto C.
De esta manera tu público va asimilar mejor lo que quieras comunicarle y también puedes lograr un mayor impacto en tu audiencia.
Para finalizar, te reitero que existen cantidad de técnicas que te quedarías boquiabierto. Se han escrito libros solamente sobre este tema y sería bueno que profundizaras en ellos.
Pero si quieres ir directo a lo que funciona, deberás ir a lo básico, a ese 20 o 30% que te entrega los mayores resultados.
Practica, esto no es cosa de hacerla una vez y ya. Practica en cada oportunidad que tengas. Toda habilidad lleva su tiempo y trabajo perfeccionarla. No intentes poner todo esto en practica al mismo tiempo. Por lo menos, no ahora o cuando empiezas.
Empieza caminando con la espalda recta, hombros hacia atrás y cabeza levemente hacia arriba y haz contacto visual con todo el mundo.
¿Lo tienes? Muy bien, puedes seguir incluyendo más cosas a tu arsenal de lenguaje corporal persuasivo.
Será hasta una próxima ocasión,
Damián Cáceres.
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