¿Crees que el salario mínimo fijado por ley pueda ser una mejora para los trabajadores y para la economía en general? ¿Crees que así se pueda mejorar las condiciones de vida de estos y reducir la desigualdad? «Quién da más dicen los políticos en campaña», es que así “tenemos una sociedad más igual”.

¡Espera! ¿Me estás diciendo que se va a reducir la desigualdad?

Pero si esta no es un problema, buscarla a la fuerza es repugnante. La desigualdad es parte del hombre y de la naturaleza. Nadie es igual a otro. Podemos ser semejantes, pero no iguales.

Y esto también aplica a la economía de las personas. Tanto los ingresos como el patrimonio son en buena medida consecuencias de esta desigualdad intrínseca del hombre.

No digo que en todos los casos sea algo a evitar, no. Cuando se da naturalmente no habría problemas.

Mas de alguno podrá replicar que no tengo sensibilidad con los más necesitados. Y te digo que no se trata de eso.

Podemos ayudar a los más necesitados, incluso que es nuestro deber hacerlo.

Ahora, lo que sí está bien es que todos, especialmente los más necesitados puedan tener un mejor nivel de vida.

Y ¿esto se consigue con aumentar el salario mínimo?

De eso trata este artículo. Pero aclaro antes, que no es un ensayo académico, ni soy un doctor en economía. Vamos, que no se necesita serlo tampoco para entender estas cosas.

Si te puedo decir que soy alguien a quien le importa y le gusta estudiar, investigar y pensar sobre este y otros temas.

Espero te pueda dejar claro cuáles son las ventajas y las desventajas de establecer por ley el salario mínimo y aumentarlo.

Si realmente ayuda o no a los trabajadores menos remunerados a mejorar sus condiciones de vida y darle más oportunidades para surgir.

¿Qué es el salario mínimo?

También denominado salario mínimo interprofesional en algunos lugares (como España). Es el ingreso mínimo fijado por una ley, que recibe el trabajador o empleado por las funciones que realiza en una organización (sea pública o privada) determinada.

Acá algo importante es que se trata de un salario fijado por la ley, no es fijado por las empresas.

En la mayoría de los países occidentales existen este tipo de leyes, que tienen diversas justificaciones, entre ellas está proteger a los trabajares de los abusos de los empleadores, reducir la desigualdad, aumentar el poder adquisitivo de las personas y en general, mejorar las condiciones de vida de los empleados peor remunerados del mercado laboral.

Ahora que todo esto se cumpla, es otra cosa…

El Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ¿en realidad ayuda a mejorar las condiciones de vida de los trabajadores?

Por lo general, esto es algo que ni se cuestiona. Los políticos ofrecen para sus campañas aumentar el salario mínimo, volviéndose una subasta por quien ofrece más.

Pero ¿es esto del todo cierto? ¿es posible que incluso pueda perjudicar a los propios trabajadores?

Oferta y demanda de empleo.

La ley de la oferta y la demanda es de las más importantes en una economía de mercado. Y de una manera simple es la cantidad de algo (bien, producto, servicio o mercancía) y cuantas personas o instituciones quieren y están solicitando ese algo.

En el caso del empleo vendría siendo cuántos trabajadores están ofreciendo sus servicios y cuántas empresas están demandando a estos trabajadores.

Así, tenemos que, si se da el caso de haber muchos trabajadores demandando empleo, y pocas empresas ofreciéndolo o lo que es lo mismo, si hay mucha oferta de empleo y poca demanda de este, ocurre que los precios (en este caso, los salarios) van a disminuir.

Es que la ley de la oferta y la demanda está presente en el mercado laboral.

Si hay mucho de algo ofreciéndose en el mercado y poco demandándose, entonces los precios van a ir a la baja.

Así pasa con el empleo.

Esto me recuerda el caso de los prevencionistas de riesgos acá en mi país. Hace unos años, era un trabajo muy demandado, sobre todo por la industria minera y como había pocos estaban muy bien remunerados.

Entonces, muchos jóvenes empezaron a estudiar esta carrera en la universidad. Esto llegó a tal punto, que se produjo una casi saturación de la carrera.

En definitiva, ahora hay muchos prevencionistas de riesgos, pero la demanda no aumentó conforme como lo hacía la oferta.

Los salarios bajaron, ya que había muchos compitiendo por los puestos vacantes en las empresas.

Ahora te estarás preguntando ¿qué tiene que ver todo esto con el salario mínimo?

Bueno, que los salarios se regulan en la economía mediante la ley de la oferta y la demanda y que si queremos aumentarlos sería mucho mejor propiciar las condiciones necesarias para que haya crecimiento económico y de esta manera, mayor demanda de empleo por parte de las empresas (u otras organizaciones).

Punto de equilibrio.

¿Qué ocurre si se aumenta el salario mínimo mediante una ley?

Deberíamos distinguir primero en qué condiciones se encuentra la economía ¿está habiendo crecimiento?

No pasaría nada si la oferta de empleo por parte de las empresas supera a la demanda por parte de los trabajadores.

Mientras el salario mínimo no supere el punto de equilibrio, pues no habrá efectos perjudiciales para la economía del país.

Pero el problema se torna cuando el salario mínimo (o SMI) supera este punto.

Cuando una empresa ve que se le obliga a pagar a un trabajador más de lo que este produce o donde no hay un margen de ganancias lo suficientemente bueno como para mantener a este trabajador, simplemente optará por despedirlo.

Ahora mira esto de manera global y te darás cuenta cómo afecta a la economía de un país y más concretamente a las condiciones de vida de las personas.

Porque, habrá un aumento. No del salario, sino del desempleo. Quedando fuera las personas menos productivas de la sociedad.

Una persona que produce mil dólares o euros y se establece que el salario mínimo ahora va a ser de mil quinientos dólares o euros. Evidente que ya no es rentable para la empresa, por lo tanto, se ve en la obligación de prescindir de esta.

Entonces, manteniendo el salario mínimo por debajo del punto de equilibrio no significa mayores problemas, pero precisamente el problema radica en que es difícil saber dónde está dicho punto.

Las empresas que no pueden pagar los aumentos del salario mínimo.

Siguiendo con lo anterior, al haber aumentos demasiados drásticos del salario mínimo interprofesional, habrá empresas que no podrán pagarlos.

Especialmente las pequeñas y medianas empresas (PYMES). Esto va a tener consecuencias para estos negocios.

Por un lado, podría significar el cierre del negocio, que sería el peor escenario.

Ocurre también, que puede aumentar el endeudamiento para poder hacer frente a los costos de la mano de obra.

Y puede significar una limitación al crecimiento de dichos negocios (o sea, que les cueste más crecer) o simplemente hacerlos reducir su operación (lo que significa despedir a parte de sus empleados).

De esta forma, no pueden competir de manera óptima en el mercado, dando una ventaja artificial a las grandes empresas que si tienen el músculo financiero para poder pagar más a sus trabajadores menos productivos.

Las grandes empresas, pueden alegar que se les aumentan los costos, lo cual es cierto, pero también se aseguran de eliminar a parte de su competencia que en una de esas les podrían arrebatar una parte importante de su cuota de mercado.

Bueno ¿en qué afecta todo esto al trabajador, si al final es problema de las empresas, sean estas pequeñas, medianas o grandes?

Marginación de una parte de la fuerza laboral.

Efectivamente. Una parte de los trabajadores quedarán marginados del mercado laboral. Porque, las empresas en su esfuerzo por ser competitivas y por sobrevivir se van a deshacer de los costos más altos, debido al aumento en el salario mínimo.

¿Qué trabajadores quedarán marginados?

Los menos productivos.

Y esto lo considero lamentable, porque, precisamente son ellos los que necesitan de más oportunidades para poder mejorar sus condiciones de vida.

Supongamos que el salario mínimo interprofesional es de 1000 euros. Entonces, todos aquellos trabajadores que produzcan menos de esa cantidad quedarán fuera del mercado formal de trabajo.

Precarización de las condiciones laborales.

De esta manera, las condiciones de trabajo tienden a verse precarizadas, por el hecho, que ya no cuentan con un contrato de trabajo que resguarde ciertos derechos de los trabajadores.

La contratación en negro aumenta y con esto los abusos laborales que muchas personas se ven obligadas a soportar.

Bueno, como que después de todo, no es tan buena idea andar subiendo el salario mínimo interprofesional, así como así.

Pero ¿cómo es que se puede mejorar las condiciones de vida de los trabajadores? ¿cómo pueden aumentar los salarios en general, pero especialmente los más bajos?

Automatización.

Cuando el costo de la mano de obra ya es muy alto, hay más incentivos para que las grandes empresas inviertan en la automatización de sus procesos con más tecnología.

Tengamos en cuenta, que las grandes empresas tienen esta tendencia. Y los que dan más empleo son las PYMES. En la mayoría de los países dan más del 60% de todo el empleo.

Pero ¿cómo es que se puede mejorar las condiciones de vida de los trabajadores? ¿cómo pueden aumentar los salarios en general, pero especialmente los más bajos?

Productividad.

Aumentando la productividad de los trabajadores.

Y ¿cómo se aumenta la productividad de estos?

La respuesta da para otro artículo, pero una de las cosas que incide en esto, es con más acceso a la educación que el mercado esté demandando.

Bueno, y con una mejor educación también.

Ya te digo que especializaciones en “perspectiva de género” no ayudan a mejorar en nada los salarios de los empleados.

Las regulaciones.

Otra forma de mejorar los salarios en general y también los más bajos, es eliminando regulaciones absurdas que encarecen la contratación de personal.

Si para pagarle a un trabajador 1000 euros, el empleador debe de gastar 1500 euros mejor sería eliminar todas esas regulaciones y trámites burocráticos e inmediatamente se podría mejorar ese sueldo.

Países sin leyes de salario mínimo.

Cuando se establece por ley un salario mínimo interprofesional que supera el punto de equilibrio, ocurre que se deja fuera del marcado (formal, por lo menos) a una parte de la fuerza laboral.

Que serían los menos productivos. Y con esto se obstaculiza que puedan mejorar su productividad, por ejemplo, con ciertas capacitaciones.

También, se perjudica el ahorro y el consumo (se está dejando fuera a una parte de los trabajadores que ya no pueden consumir o ahorrar como antes).

Con esto, se afecta también, el crecimiento económico.

Existen países donde no hay leyes de salario mínimo y curiosamente nos encontramos con los salarios medios más altos del mundo.

Y no solo eso, sino que los sueldos más bajos se encuentran entre los más altos del mundo también.

La tasa de desempleo también es bastante baja.

 Países como Suiza, Finlandia, Suecia, Dinamarca, República Checa, Italia, Austria, entre otros.

Es cierto que su prosperidad no está dada solamente por no tener un salario mínimo establecido por ley. Sin embargo, el hecho de no contar con leyes de este tipo ha permitido que el aumento de los salarios no sea afectado y hayan podido seguir creciendo de acuerdo con el aumento de la riqueza de estos países.

Conclusión.

En definitiva, aumentar el salario mínimo interprofesional puede parecer una buena medida para mejorar el poder adquisitivo de quienes menos ingresos tienen. Y si bien, esto puede ser bien intencionado (vamos, que no le creamos a los políticos), una medida así no resuelve el problema. Es más, lo agrava.

Si se hace de manera muy agresiva empresas y trabajadores se ven perjudicados y en no poca medida.

Si se hace con aumentos que no estén por sobre el punto de equilibrio y que sean solo marginales, bueno ahí no se afecta tanto el empleo y si consideramos que la economía siga creciendo.

Entonces ¿será necesario mantener este tipo de políticas? Pues no.

Es innecesario en el mejor de los casos y puede ser muy perjudicial en el peor de estos.

Marginación del mercado laboral de la mano de obra menos cualificada, cierre de los negocios que no puedan hacer frente al alza en los precios de la contratación de personal, favorecer monopolios (ya que se elimina la competencia, que, por lo general, son los negocios más pequeños), precarización de las condiciones de trabajo, falta de oportunidades, inflación, endeudamiento, desempleo, etc.

Para graficarlo de mejor manera, imagina que tienes una cafetería que factura 12 dólares al mes.

Tienes 5 empleados a los cuales les pagas el salario mínimo, fijado por la ley de 1000 dólares.

Solo en tus trabajadores te gastas USD 5000. Más los costos e impuestos supongamos que tu margen de ganancias es de USD 2500.

Y ten en cuenta que, por un tiempo, casi no tuviste ganancias como para pagarte, aunque sea modesto sueldo. Esto es algo que los emprendedores lo pueden entender bien. Te has arriesgado, ahorrado, endeudado y trabajado mucho por sacar tu emprendimiento adelante.

Entonces, llega un día que los políticos en sus ofertones prometen subir el SMI a USD 1500 Sentirías la preocupación ¿no?

A estos políticos les encanta hacer ofertones para salir electos, no habría problemas si ellos comprometieran su propio patrimonio, pero no… Los hacen con el dinero ajeno. En este caso hipotético, con tu dinero.

Imagina tener que quedarte sin ganancias a partir de la fecha de entrada en vigor de la nueva ley de salario mínimo.

Cualquier emprendedor se vería forzado a prescindir de los servicios de 1 o 2 empleados y ponerse a trabajar mucho más para suplir la falta de estas 2 personas que despidió.

Esto tiene implicancias mayores. Supongamos que estabas considerando seriamente expandirte y abrir otra sucursal en otro barrio, habiendo generado más empleo, por ejemplo.

Pero después de esto, ya no lo crees posible, porque, el tiempo te lo absorbe suplir la falta de esos empleados que ya no están.

 Las consecuencias no creo que le gusten precisamente a quienes se quiere ayudar. Aunque sigue subsistiendo la problemática de cómo poder aumentar el salario en general y sobre todo a quienes menos dinero ganan.

Y bien, podemos seguir el ejemplo de países como Suiza, en donde se propicia el crecimiento económico, una educación de alta calidad que conlleva a una alta productividad de los trabajadores y pocas regulaciones laborales… Ah sin leyes de salario mínimo.

Me parece que ese es ejemplo que podríamos imitar en nuestros países, bajas regulaciones laborales, eliminar las leyes de salario mínimo interprofesional, propiciar el crecimiento económico, el ahorro y la inversión y que haya mejor educación para ser más productivos (los trabajadores).

Esto último, es especialmente complicado, pues los gobiernos utilizan el sistema educativo para adoctrinar.

Bien, esto es todo por este ahora.

Un Abrazo,

Damián Cáceres.